lunes, 27 de octubre de 2014

Cuba y su Música: Algunas vertientes del Son cubano.



El Son cubano es un genero musical originario del oriente de la Isla, y el ritmo por excelencia de la música cubana, que desde los años iniciales hizo notar su auge debido a la cantidad de autores, compositores, orquestas y obras que surgieron y se desarrollaron, teniendo gran aceptación por todos. Sin embargo hoy en día en la isla pueden encontrarse algunas variantes del Son que todos conocemos  como: El Changüí, El Nengón, y El Kiribá que permanecen casi “Cimarrones” en el tiempo, fundamentalmente en el oriente, en su expresión más autóctona. Mientras el Sucu-Sucu, tuvo sus orígenes en la Isla de pinos, hoy día llamada Isla de la Juventud.


El Changüí es considerado por algunos autores como madre del Son, El changüí es una música de origen rural o montuna. Surgió, al igual que el Son, en la misma parte de la isla de Cuba, más específicamente en los municipios cercanos a la ciudad de Guantánamo. El changüí se deriva del Nengón y su nacimiento, a fines del siglo XIX, está vinculado a figuras como el tresero Nené Manfugás. Es interpretado con instrumentos como la guitarra tres, la marimba, el güiro, las claves y las maracas. Obras de gran significación changüisera se encuentran en: "El guararey de Pastorita", "Camarón", "Que buena fiesta en Cecilia" y entre los grupos se destacan el Grupo Changüí de Guantánamo, grupo de Chito Latamblet, y las orquestas de Elio y Odelquis Revé entre otros.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Iré a Santiago...

Cuando llegue la luna llena
iré a Santiago de Cuba, iré a Santiago...,
en un coche de agua negra,
iré a Santiago de Cuba, iré a Santiago...
Cantarán los techos de palmera,
cuando la palma quiere ser cigüeña,
y cuando quiere ser medusa el plátano, iré a Santiago
con la rubia cabeza de Fonseca.
y con el rosal de Romeo y Julieta,
mar de papel y plata de moneda.
¡Oh Cuba! ¡Oh ritmo de semillas secas!
¡Oh cintura caliente y gota de madera!
¡Arpa de troncos vivos, caimán, flor de tabaco!
Siempre dije que yo iría a Santiago.
En un coche de agua negra.
Iré a Santiago de Cuba,
iré a Santiago...

FRAGMENTO DEL POEMA. SON DE NEGROS EN CUBA
DE FEDERICO GARCÍA LORCA.

Aquel primer viaje para visitar el Santuario  de la Virgen de la Caridad del Cobre en Santiago de Cuba, no había estado exento de contratiempos. Era el tercer tren que se nos iba en igual cantidad de días por la avalancha de pasajeros que siempre abarrotaban esa ruta y otra cualquiera. Por lo tanto a la cuarta iba la vencida. Y así fue. Finalmente en un pasillo amontonado, por personas, cajas y animales, emprendí acompañado por tres amigos, mi primera experiencia hacia ese lugar sagrado para muchos cubanos. En la agenda de mis amigos y en la mía también, iba un objetivo prioritario y difícil de lograr, pero con una fe absoluta en que la Virgen nos ayudaría en nuestros clamores. Era un  verano de la primera mitad de los noventa, que sacudía la isla con una crisis espantosa. Hacía un calor insoportable y olores de todo tipo y tras el prolongado pitazo que anunciaba la partida, lográbamos salir desde Camagüey, hacia un lugar que siempre emociona visitarlo. 

De inmediato empezaban a asomar todo tipo de personajes que iban a protagonizar aquel largo viaje; pero una de las cosas que más me llamó la atención fue la puja por la compra de una Calabaza de las llamadas de Corneta, que tienen mucha masa, pocas semillas y exquisito sabor. Recuerdo que el dueño de la calabaza, abrazaba aquel preciado fruto de la naturaleza, como si fuera una hija muy querida.